La navidad parroquial
en Sopetrán.
La parroquia de Nuestra Señora de la
Asunción, en su Basílica, está mostrando las bondades y la alegría de la
navidad, así luce la nave del centro de la Basílica.
El altar mayor, es un verdadero
espectáculo de luz y de color.
Así está decorado el candelabro que
sostiene el cirio pascual.
Este es el árbol de navidad de
nuestra Parroquia.
El Bautisterio, también fue muy bien
organizado, para el período de navidad.
El altar del Santísimo Sacramento
luce de una manera especial, recordemos que como es Él, el dueño de la casa,
todos los esfuerzos se concentran en mantener su altar, a la altura de las
circunstancias.
Las flores abundan por todos los
rincones y el sagrario, fue decorado con algunos elementos navideños.
El altar en toda su dimensión, se
aprecia así.
Ahora analicemos el pesebre, que fue
diseñado, para que perteneciera al grupo de los pesebres bíblicos.
Recordemos que cuando hay un telón de
fondo, tan especial, como éste, no se debe invadir con ningún elemento del
pesebre, para que cumpla con la finalidad de ser la parte profunda del pesebre.
La escena que sigue, es un
acontecimiento normal, en la vida del pueblo israelita, durante la época del
nacimiento.
Si recordamos la palabra: Bet léhem,
del hebreo, בארץ
הלחם, que traduce: En la tierra del pan, esta escena es la más
apropiada, porque según se me explicó, va a vender en sus canastos, pan, como
se hacía en los tiempos del nacimiento de Jesucristo
Esta es la escena perfecta, para un pesebre bíblico.
Esa fue la explicación que recibí del diseñador del pesebre.
Esta escena, está mostrando a sus diseñadores,
en una decisión correcta, en el manejo de la profundidad y la lejanía en el
pesebre.
Esto consiste en que las figuras más
pequeñas, están en la parte profunda y las más grandes en la primera etapa,
para causar el efecto de que a medida que la distancia es más larga, las
imágenes pierden tamaño.
No podía faltar un oasis en medio de
las cálidas tierras de Israel, y por esta razón, los pesebres bíblicos, tienen
ese recurso natural.
Este es un buen rincón de nuestro
pesebre, porque está mostrando la abundancia de los ganados ovino, mular y
caballar.
Dos pastores conversan, mientras
cuidan de sus rebaños; la única lástima es que el que tiene capa de color
blanco, le esté dando la espalda, a su majestad el público.
Recordemos: Que en los pasos de las
semanas santas y en los pesebres, no debe haber imágenes que le den la espalda
a los admiradores.
Las posiciones que se permiten son
muchas y en este caso, se hubiera podido poner de medio lado, o de soslayo, como también se puede decir, para que los
visitantes puedan ver la calidad de su rostro.
Esta ilustre damisela, de ojos
preciosos y rostro perfecto, está haciendo el oficio obligado de todos los
moradores de estas desérticas tierra: Buscando agua en los pozos, a ellas se
les describía con un hermoso nombre: Aguadoras.
Por último, veamos distintos planos
del pesebre:
Plano profundo:
Lateral del portal:
Plano medio:
Observen, como las figuras más
lejanas, se ven más pequeñas, para producir el efecto de profundidad.
Observen las dos falencias, que
anuncié:
Un pastor de espaldas al público y el
telón de fondo, no cumple con la misión de ser el plano profundo del pesebre.
Es muy interesante contarles: Que el
Señor Rector de la Basílica, El Padre Rogelio Rodríguez Graciano, cuando estuve
visitando el templo, mientras manufacturaban el pesebre, estaba presente, dando
las instrucciones correspondientes, para que pudiera lucir en la mejor forma.
Sopetrán, Diciembre 16 del 2017.
Darío Sevillano Álvarez