Las escalas
que, los humanos han inventado y sus utilidades.
Una escala
de medición es una referencia o guía, para determinar los instrumentos de
medición, con el fin de obtener resultados de datos cuantitativos.
Las escalas
se utilizan en estadística, para organizar, clasificar y comparar, un conjunto
de datos.
Existen
cuatro tipos principales de escalas, a saber:
Nominales,
ordinales, de intervalo y de razón.
La medición es un
procedimiento para determinar resultados (números) que, representan la cantidad
de características (atributos) que, poseen los sujetos de una población o
muestra.
La medida son las reglas de
asignación de números a varios objetos de tal manera que este número represente
la calidad del atributo.
Una buena medida debe tener
la naturaleza de isomorfismo, es decir igual forma, con la realidad.
Esto significa que existe
una estrecha similitud entre la realidad en estudio y el valor obtenido de la
medición.
Por tanto, un instrumento de
medida se considera bueno si los resultados, pueden reflejar con precisión la
realidad del fenómeno a medir.
Una escala de medición es un
criterio de ordenación utilizado en estadística para organizar, clasificar y
comparar un conjunto de datos.
Son sistemas de
clasificación mediante los cuales la información se puede ordenar, de acuerdo a
una jerarquía preestablecida.
La variable nominal y
ordinal es aquella que, permite categorizar los datos de manera que, en la
nominal, el orden no es importante, mientras que, sí lo es en la ordinal.
Por tanto, este tipo de
variables se utilizan para agrupar datos.
La diferencia esencial entre
ambas es la que hemos comentado: El orden.
Las escalas que más
manejamos son las que, se relacionan con los temblores de tierra y los
terremotos.
La escala de Richter es una
herramienta de medida para cuantificar la magnitud local de un
terremoto atendiendo a la amplitud captada por el
sismógrafo, y a la que se aplica un término de corrección para cada estación.
La escala de terremotos posee una base
logarítmica donde la magnitud de cada grado es 32 veces mayor que la
anterior.
A raíz de esto la amplitud de
esta puede ser muy alta, por lo que en la actualidad se consiguen valores
negativos de esta variable.
La escala de magnitud de
Richter es una graduación abierta donde no existe un límite de
magnitud.
En otras palabras, queda
disponible la alternativa de un sismo que propicie un nuevo nivel.
Los niveles convencionales
incluyen:
Magnitud inferior a 3,5: queda
reflejada en los sismógrafos, pero no es perceptible sensorialmente por los
humanos.
Magnitud entre 3,5 - 5,4: aunque se
puede sentir el temblor, este solo causa daños leves.
Magnitud entre 5,5 - 6: ocasiona daños
menores a las estructuras de los edificios.
Magnitud entre 6,1 - 6,9: son capaces
de provocar daños importantes en ciudades con elevada densidad poblacional.
Magnitud entre 7,0 – 7,9: terremotos
importantes causantes de graves daños.
Magnitud 8 o superior: grandes
terremotos capaces de destruir en su totalidad núcleos urbanos cercanos.
Hay dos
escalas que miden los temblores de tierra de modos diferentes: La de Richter y
la de Mercalli, veamos las diferencias:
Aunque estudian el mismo
fenómeno geológico, ambos métodos de medición fijan la atención en dos
variables distintas que pueden llegar a confundirse.
En el caso de la escala Richter, se
mide la magnitud del sismo, es decir, la energía
liberada que produce.
Mientras, la escala Mercalli se basa en
la observación de la intensidad del terremoto, en otras palabras, de los
efectos que este produce a su paso.
Por tanto, una de las diferencias entre la escala
de terremotos propuesta por Richter y la de Mercalli es la variable que
considera a la hora de establecer sus límites. Además, la escala de
magnitud sísmica corresponde a un tipo de sistema abierto donde se
puede establecer nuevos niveles con el paso del tiempo, debido a la
sofisticación de los aparatos de medición. Por otra parte, su crecimiento
no es lineal, sino que responde a una escala de origen logarítmico.
Por su parte, la escala de Mercalli plantea un
enfoque diferente, señalando la intensidad como alternativa. Se trata de
una escala cerrada compuesta de doce niveles expresados en números
romanos donde se señalan los efectos del sismo. Esto se debe a que, una vez
destruidos todos los elementos de la población, no se puede avanzar más en los
niveles de este tipo de escala. Esta diferencia se suma a la variabilidad
de resultados que la escala de Mercalli puede arrojar en diferentes lugares
del mundo. Al sopesar solo el efecto sobre la población, consideraciones como
la integridad estructural de los edificios o la densidad de población quedan en
un segundo plano, aun siendo, como se ha señalado, factores
fundamentales para medir un terremoto. Por esta razón, se ha modificado en
numerosas ocasiones.
Hay una
escala especializada en medir la oscuridad del cielo en las distintas partes
del planeta, a esta la conocemos con el nombre de escala de Bortle.
Esta escala
tiene nueve niveles y en ella el primer nivel es el de los cielos más oscuros y
el nivel nueve es de los cielos más claros.
Unas escalas
que tienen que ver con la descripción de mapas y planos y a estas, las
conocemos con el nombre de escalas de Binklearning.
La cartografía es la ciencia
que estudia los mapas y cómo realizarlos.
Hay unas escalas que, los científicos
utilizan para medir los cambios climáticos, estas son:
En el caso del cambio climático, podemos comparar
las distintas escalas temporales observando ejemplos como los que aparecen a
continuación.
Ciclos
de Milankovitch: Los ciclos
de Milankovitch describen el cambio cíclico en el clima de la Tierra debido a
las fluctuaciones en la órbita de la Tierra.
Más específicamente, los cambios en la forma de la órbita de la Tierra,
su inclinación y su oscilación pueden influir en el clima.
Estos cambios tardan miles de años en afianzarse y son responsables de
la ocurrencia natural de la mayoría de las edades de hielo y períodos más
cálidos en el planeta Tierra.
Tectónica
de placas: la tectónica de placas
se refiere al movimiento de la corteza terrestre debido a las corrientes de
convección dentro del magma en el manto terrestre.
Este movimiento puede provocar diversos fenómenos, desde la deriva continental hasta la formación de volcanes.
Cuando dicha actividad volcánica libera compuestos como dióxido de
carbono y dióxido de azufre, puede causar un efecto de calentamiento o
enfriamiento en el clima de la Tierra.
Pero los cambios a largo plazo en la temperatura de la Tierra requieren
períodos sostenidos de mayor o menor actividad volcánica.
Erupciones
volcánicas: las erupciones
volcánicas se refieren a la liberación repentina de lava y gas desde debajo de
la superficie de la Tierra.
Debido a que tales erupciones liberan grandes cantidades de dióxido de
azufre, normalmente tienen un efecto de enfriamiento neto en el clima de la
Tierra.
Los cambios en el clima debidos a erupciones volcánicas específicas
pueden ocurrir en escalas de tiempo muy breves; Los efectos normalmente se
pueden observar después de sólo un año.
Rayos
galácticos: las partículas entrantes
del espacio exterior, generalmente denominadas “rayos galácticos”, también
desempeñan un pequeño papel en la regulación del clima de la Tierra.
Estos rayos entrantes pueden formar núcleos de condensación de nubes en
lo alto de la atmósfera terrestre y provocar una mayor cobertura de nubes, lo
que puede proteger a la Tierra de la luz solar y enfriar el planeta.
Sin embargo, la investigación sobre estos cambios ha demostrado que el
efecto es muy pequeño y que las escalas de tiempo son grandes.
Cambio
Climático Antropógeno: El cambio
climático antropogénico es el cambio climático debido a la acción humana,
principalmente por la emisión de gases de efecto invernadero provenientes de la
combustión de combustibles fósiles.
Hasta ahora, los humanos han alterado el clima global en aproximadamente
1°C o 1,8°F. Este cambio ha ocurrido abruptamente, en el transcurso de sólo uno
o dos siglos, y el ritmo se está acelerando.
La
Escala Beaufort es un sistema que se usa para medir la fuerza del viento y cómo
afecta al mar y a la tierra." Esta escala proporciona una forma práctica
de describir la velocidad del viento y cómo este afecta las condiciones en el
océano y en la tierra.
La
Escala Beaufort fue creada a principios del siglo XIX por Sir Francis Beaufort,
un oficial de la Marina Real Británica. Beaufort desarrolló esta escala como
una forma de estandarizar la forma en que los marineros describían las
condiciones del viento y del mar.
Su
objetivo era proporcionar una medida uniforme que permitiera a los marineros
comunicarse de manera más efectiva sobre las condiciones meteorológicas.
La
Escala Beaufort mide la velocidad del viendo.
Tiene 12 categorías, cada una con una velocidad de viento
específica y sus efectos en el mar y en la tierra.
En la categoría 0, el mar está
tranquilo y el viento es suave. En la categoría fuerza 12, hay un huracán con
vientos de más de 118 km/h. Se utilizan anemómetros o una estación meteorológica
para medir como sopla el viento.
La escala de medición y tamaño es una forma inteligente de reducir o
ampliar un dibujo.
La escala es la
relación que existe entre el tamaño de un dibujo y el tamaño del objeto real.
La escala empleada
en los dibujos suele indicarse mediante una proporción.
Las escalas son factores de
multiplicación de las medidas del objeto, para poder hacer las representaciones
de sus dimensiones, en los papeles de los que disponemos.
Fíjate como la altura de 320
metros de la torre Eiffel dibujada a una escala de reducción 1:300 mide en el
papel 1,06 metros.
Hay una escala que se llama de longitud de onda.
La escala de longitud de onda se puede calcular,
dividiéndola velocidad de propagación de la onda por su frecuencia, o
multiplicándola velocidad de propagación, por su período.
La longitud de onda también está relacionada con el
espectro visible de luz y, radiaciones: Infrarrojas y, ultravioletas.
Hay una escala que sirve para medir el dolor de los
humanos y se puede expresar de varias maneras
Escala numérica: del 0 al 10,
donde 0 representa ausencia de dolor y 10 el peor dolor imaginable.
Escala visual analógica: una
línea de 10 cm sin números para señalar la intensidad del dolor.
Escala de caras: ideal para
niños, donde seleccionas una cara que representa mejor tu nivel de dolor.
El dolor no es
igual para todos, es una expresión subjetiva, la cual no es igual para todo
el mundo ni todo tipo de dolor es igual, existen distintos
tipos de dolor.
No es lo mismo un corte con una hoja de
papel, que a todos nos ha pasado alguna vez, que por ejemplo darse un golpe o
sufrir un dolor postoperatorio, por poner un ejemplo muy básico de distintos
tipos de dolor que existen. Por eso, en ocasiones se suele hablar de nivel de
dolores y son necesarias formas de medirlo como la escala de EVA, de la que
hemos hablado más arriba.
Hay muchas otras escalas, pero mi finalidad era
anúnciales algunas de ellas, tal vez las más conocidas.
Sopetrán, diciembre 10 del 2024.
Darío Sevillano Álvarez.