Los problemas que genera
la pólvora que quemamos en las festividades religiosas.
Es una verdadera lástima
que los humanos, que somos la mejor forma de vida que hay en el planeta tierra,
estemos convirtiendo las grandes fiestas religiosas, en un espectáculo
siniestro, para la conservación ecológica de nuestro dulce hogar, en el
universo.
Aunque en muchos pueblos
de la tierra, los fuegos pirotécnicos, están prohibidos, algunas
municipalidades, con un atraso cultural de 50 años, permiten que los podamos
utilizar, para solemnizar nuestras fiestas.
Lamentablemente estos
fuegos, tienen un peligroso impacto, para el medio ambiente, las personas y los
animales.
Para resaltar lo que
afirmo en el párrafo anterior, puedo citar los siguientes hechos:
En el medio ambiente, el
humo y los residuos químicos que generan los juegos pirotécnicos, se suman a
todos los factores, que generan: El efecto invernadero y el calentamiento
global, producido por la contaminación de la famosa capa de ozono, que es la
que nos protege de la acción de los rayos ultravioleta del sol y de las demás partes
del universo.
Asimismo, generan material particulado como:
pólvora, azufre o carbono que, se quedan en el aire y luego puede ser ingerido
por las vías respiratorias de los seres vivos; este fenómeno, produce en ellos,
un sin número de enfermedades respiratorias y digestivas que la medicina
tradicional, no es capaz de tratar adecuadamente.
Los fuegos artificiales generan gases dañinos y
partículas que afectan la calidad del aire local; este factor puede molestar la
salud de los animales los vegetales y el hombre.
Tambien es bueno recordarles que la cantidad de
basura que generan los empaques en que se envuelven las distintas formas de
fuegos pirotécnicos, son otro motivo de preocupación para los empleados de las
empresas públicas municipales.
Les puedo contar una anécdota, que ocurrió en
sopetrán en los años cincuenta, cuando un ciudadano recogió un empaque de un
taco que, no había estallado y en ese momento le estalló en su mano derecha, la
cual desapareció para siempre; a ese personaje, le decíamos: El mocho Franco.
A las ciudades que han adaptado la norma de no
permitir quemar estos juegos pirotécnicos, las conocemos con el nombre de:
Ciudades del futuro.
Tomé de un portal de internet estos apuntes, que
resultan de suma importancia, para respaldar lo que estoy escribiendo:
El uso de fuegos artificiales o
pirotecnia durante las celebraciones generan concentraciones importantes de
partículas suspendidas que superan el rango permitido por las normas oficiales.
Además, la pirotecnia también genera
contaminación acústica, afectando principalmente a bebés, niños y mascotas.
La contaminación en interiores se ha
convertido en un problema mundial de salud pública, la OMS apunta que cada año,
hay 3.8 millones de muertes prematuras asociadas a la contaminación en
interiores.
Pero les voy a compartir unas experiencias, que
adquirí en mis largos años de trabajo en Sopetrán:
¿Qué es una alborada?
Recuerden que yo manejé la banda de música del
municipio por espacio de 18 años y de esos 18 años, fui contratado 14 de ellos,
para tocar las festividades de nuestra Señora la virgen María.
Cuando hay una alborada, los músicos deben estar en
la plaza a las cuatro de la mañana, para subirse a una escalera en la cual,
están una mano de borrachos, cada uno con su botella de aguardiente, para
recorrer algunos lugares de los suburbios y la alborada termina en el parque
principal a las ocho de la mañana.
Quiero que me indiquen que tipo de celebración es
esta alcahuetería, porque: No está la virgen; no están los sacerdotes; no se
rezan oraciones; no hay ningún tipo de comportamiento religioso, que pueda
justificar; esto que, para mí, es una fiesta de borrachos.
Pero debemos recordar que una alborada, es: Música brillante tocada al amanecer y al aire libre para festejar a un
pueblo o a una persona.
Las primeras alboradas que toqué para estas
fiestas, eran verdaderas mañanitas para la población; porque la banda tocaba
música colombiana muy brillante.
A las doce del día se tocan más o menos cinco
piezas musicales, pero no son valses de: Verdi, ni de Strauss; sino música
parrandera.
A esto lo llaman una retreta.
Pero una retreta es: Función musical nocturna al aire libre, generalmente en
parques y paseos, para divertir a los habitantes de un pueblo.
Explíquenme que tiene que ver esto con la
celebración religiosa de nuestra patrona.
En las horas de la noche, porque ninguna procesión
de las nueve que hacemos, llega a las seis de la tarde, sino a eso de las siete
de la noche; llega el cuadro de nuestra señora, se queman una cantidad muy
grade de billetes, que podría curar la situación de hambre de muchos miembros
de nuestro pueblo, que ni desayunan, ni almuerzan, ni comen.
¿Creen ustedes que esto es, justicia social?
Me gustó mucho la actitud de unos seis alféreces
que, en el presente año, no quemaron pólvora y le regalaron esos pesos a la
parroquia, para que el Padre: Eddy Alberto Valencia Vázquez, pueda cubrir los
gastos de la reparación del techo de la Basílica, en donde cae más agua adentro
que afuera.
Voy a sugerirle al Párroco que, para años
venideros, les asigne días de la novena, a aquellos feligreses, que no quemen pólvora.
Es bueno que sepan que en conversaciones que he sostenido
con él, durante la celebración de la novena, siempre me dijo: Que nunca ha sido
partidario de quemar juegos pirotécnicos.
Tambien es bueno que sepan que él, en persona,
convenció a algunos alféreces, de no quemar juegos artificiales.
Como punto final, recuerden que:
Cada año,
cientos de personas resultan heridas debido al mal uso de artefactos
pirotécnicos, poniendo en riesgo la vida de quienes los manipulan y de aquellos
que los rodean.
Sopetrán,
agosto 15 del 2024.
Darío Sevillano Álvarez.