domingo, 18 de diciembre de 2016

Cuarto día de la novena de Aguinaldos.


DÍA CUARTO.


No es cierto que la sagrada familia, fue de casa en casa pidiendo posada y al final fueron a parar a una cueva.


“Y dio a luz a su hijo, lo envolvió en pañales y lo acostó en un pesebre, porque no tenía sitio en el albergue” Lucas II,  7.

Los evangelistas, no hablan de éste asunto, pues Lucas dice en el capítulo 2:”Jesús niño, es depositado en un pesebre.” 

Y Mateo dice: "Simplemente, en la casa”. 

La idea de la cueva, surge, porque las casa de esa época, eran empotradas en las rocas, casi todas tenían pesebrera y en cada pesebrera, había un pesebre o cajón para colocar el pasto de los animales.


También es buena recordar, que los evangelios apócrifos, y hasta los canónicos, hablan de una gruta; pero sin duda alguna, esa gruta, es la pesebrera empotrada en las rocas, que tenían las casas.

Otro aspecto que influye en esta hecho, es que Dionisio, Hermes, Zeus y Mitra, los antiguos dioses, habrían nacido en una cueva, para significar simbólicamente, la fecundidad de nuestra madre tierra.

Pero si analizamos con cuidado los evangelios, en ellos no insinúan una gruta, como tal; sino un establo. “Lo acostó en el pesebre. “ Dice Lucas.

A nadie se le ocurre pensar que a la Sagrada Familia, le fueran a negar una posada, a sabiendas que todos eran familiares y amigos de ellos; además la ley religiosa de esos pueblos, casi que obligaba a la hospitalidad, con el prójimo.


El cuento de la cueva, nació, cuando se inventaron aquello de que los habían rechazado en todas las casas y posadas; pero esto nunca ocurrió, porque José y María, eran parientes de todos los habitantes de Belén y estoy seguro de que ninguno los hubiera desechado. 

El enredo consiste, en que las Katalymas, nombre de las construcciones de la época, solo tenían una habitación para dormir y como la Virgen necesitaba privacidad para dar a luz, la instalaron en la pesebrera; además, la religión que ellos profesaban, no permitía que una parturienta, durmiera con todos, porque los contaminaba.


La conclusión es obvia: Jesús nació en la pesebrera de una casa normal de Belén.

Hablemos ahora, de unos errores que cometió San José, al llevar a la Virgen por un desierto y hacerla caminar unos 120 kilómetros, porque ella, no tenía que censarse, pues hubiera bastado con que él como cabeza de familia, se hubiera registrado y hubiera avisado, como estaba compuesto su grupo familiar.

Otro de sus errores, fue haber dejado pasar el tiempo, casi hasta la hora del parto, para viajar a Belén.

También era importante saber escoger un mejor lugar, para el nacimiento de su hijo, toda vez que Belén era un recóndito lugar que casi nadie conocía; en cambió Nazaret era una hermosa ciudad que estaba en pleno florecimiento.



Hay unos Teólogos modernos que sostienen que Jesucristo no nació en Belén, sino en Nazaret y aunque esta teoría, todavía no es muy sólida, ellos argumentan que en la biblia siempre se habla de Jesús de Nazaret.

Y en esos países, cuando se nombraba una ciudad acompañando al nombre, la ciudad era la de su nacimiento.

Dos Evangelistas muestran a Jesús naciendo en Belén y Marcos y Juan ignoran a Belén e insinúan que pudo haber nacido en Nazaret.



En los Hechos de los apóstoles, en las epístolas de Pedro y Pablo, siempre se habla de Jesús de Nazaret.

No quiere decir que esta teoría tenga que ser la más acertada, pero recordemos que cuando un hecho tiene muchos años de haber pasado, es muy difícil, demostrar todos los intríngulis que lo acompañan.

Los reyes que visitaron al niño, aún no se sabe cuántos eran, pues los investigadores, dicen que tres, que cuatro, que dos, que cuarenta. 

Pero lo importante es que los tres que conocemos, son fieles representaciones de las tres razas de la tierra: Melchor, raza blanca; Gaspar, raza amarilla; Baltasar, raza negra.

Es importante decir que la palabra Mago, se le aplicaba en esa época, a las personas estudiosas, que eran muy sabias.



También sabemos, que ni eran reyes, ni eran magos; solo eran jefes tribales, que era la usanza de la época. 

Las ofrendes que llevaron al niño, fueron: Oro como a rey; incienso como a Dios y mirra como hombre.

Supone uno que si los libros Sagrados hablan de oro, incienso y Mirra, es para darle al Niño Jesús, la importancia que tiene como Dios, como Rey y como Hombre; pero es posible que los reyes le hubieran llevado otras cosas personales de mucha importancia y valor.

Sopetrán, Diciembre 3 del 2016.


Darío Sevillano Álvarez.

Tercer día de la novena de Aguinaldos.


DÍA TERCERO:

Cristo nació, entre cinco y siete años, antes de lo que hemos enseñado.



“Nacido Jesús en Belén de Judea; en tiempos del rey Herodes”.         Mateo II-1.

Éste error fue cometido por un tal Dionisio, que era un monje escita de Roma; porque al calcular los años, para el nacimiento de Cristo, olvidó que Cesar, había gobernado cuatro años, con el nombre de Octavio y no tuvo en cuenta el año uno, ente la cuenta descendente, antes de Cristo y la  cuenta ascendente, después de Cristo. 

Este error consistió en fijar la fecha del nacimiento el 25 de Diciembre del año 753, después de la fundación de Roma; porque en estudios posteriores se supo, que el rey Herodes había muerto entre marzo y abril del año 750 después de la fundación de Roma y debemos recordar: Que Herodes persiguió a capa y espada a la sagrada familia y en esos tiempos, ni siquiera se hablaba de que estuviera enfermo.

Por otro lado, está el censo de que habla el evangelio: “Y sucedió en aquellos días que salió un decreto de parte del Cesar Augusto, para que se hiciese el censo de toda la tierra” Lucas II,  1.  Y que fue el motivo por el cual, José y María, tuvieron que trasladarse de Nazaret a Belén; las historias universales sitúan éste censo, entre los años 5 y 10, antes de Cristo.


Hay otro asunto que también preocupa y es la famosa estrella que guió a los reyes magos, sobre la cual hay una cantidad de interpretaciones, que van desde una confunción  de planetas, hasta que fuera, la estrella Alfa del Centauro o una nova; lo cierto del caso, es que ningún astro de los que hay en los cielos, se detiene sobre un punto especial.



Veamos con detenimiento estos versículos:

“Cuando nació Jesús, en Belén de Judea, bajo el reinado de Herodes, unos magos de Oriente se presentaron en Jerusalén y preguntaron: "¿Dónde está el rey de los judíos que acaba de nacer? Porque vimos su estrella en el este y hemos venido a adorarlo". Mateo II, 1 y 2.

Luego el mismo autor  en el capítulo  II, 4, 5, y 9. Dice:

“Entonces (Herodes, rey de Judea) reunió a todos los sumos sacerdotes y a los escribas del pueblo, para preguntarles en qué lugar debía nacer el Mesías”.

"En Belén de Judea, le respondieron, porque así está escrito por el Profeta".

“Después de oír al rey, ellos partieron. La estrella que habían visto en el este iba delante ellos, hasta que se detuvo en el lugar donde estaba el niño.


También influye en éste tema, la matanza de inocentes, ordenada por Herodes, para niños menores de dos años, que podría significar: Que Jesús ya estaba nacido y esto fue, según las historias profanas, en el año 6 antes de Cristo.


Es importante hacer saber que la matanza no fue de cinco mil niños y que hasta hoy, no hay una hipótesis certera, de que hubiera sido protagonizada por Herodes.

En resumen lo que hay, es una confusión de fechas y la única cosa cierta es que Jesucristo, según las hipótesis históricas más acertadas en la actualidad, nació cinco o siete años antes de lo que sabemos.


El pesebre o nacimiento que hacemos en nuestras casas, para celebrar la navidad, fue una invención de San Francisco de Asís, en el siglo XII, cuando presentó en vivo el nacimiento de Jesús, en una cueva de Greccio, un pequeño pueblo Italiano. 

Esta tradición ha perdurado, desde esa época hasta nuestros días, como una de las mejores tradiciones de la navidad.

La palabra pesebre, viene del latín Proeseprum, que significa: Cajón para echar la comida a los animales. 

También en algunas partes de la tierra se le dice Belén, que significa la tierra del pan, porque en ese lugar, en los tiempos antiguos, solo había una panadería.

Sopetrán, Diciembre 3 del 2016.

Darío Sevillano Álvarez.