lunes, 6 de marzo de 2017

La Luna y la Tierra, astros inseparables.


La Luna, nuestra gran amiga en el Universo.




 La luna y la tierra han sido grandes amigas desde hace muchos millones de años y se pudiera decir de ellas, que son un sistema binario en el sistema solar.

Los sistemas binarios en el universo, son grupos de dos cuerpos celestes que giran uno alrededor del otro.

Pero no creamos que eso de que la Luna gire alrededor del la Tierra, es una cuestión sin importancia, porque estaríamos pecando, por defecto de conocimientos acerca de ese precioso satélite natural, que prácticamente regula los procesos biológicos de nuestro dulce hogar: La tierra.

Cuando hago ésta afirmación, me tengo que tomar muy en serio la tarea de contarles a nuestros visitantes del Blogger, todas aquellas bondades que nuestro satélite nos brinda.


 Así se ven los dos cuerpos celestes en su diario ajetreo.
La Luna, es algo más importante que un elemento decorativo, respecto al planeta Tierra; recordemos que es el único satélite natural que tenemos, porque los satélites que el hombre tiene girando alrededor del planeta son elementos generadores de ciencia, de tecnología, de comunicaciones, de climatología, de progreso y de muchas cosas más para la humanidad.

Creo que es una necesidad sentida para los moradores del planeta saber todos aquellos procesos biológicos y físicos que la Luna nos brinda, para que aprendamos a mirarla, no como un cuerpo decorativo y bonito que alumbra las noches, sino como uno de nuestros mejores aliados.



Gráfico de cómo se presentan las
fases o cuartos de la Luna.

La primera maravilla que debemos conocer, es que como la Luna gira alrededor de su eje, tal como lo hace nuestro planeta; hace ese giro en los mismos veintiocho días en que hace la rotación alrededor de la Tierra y por esa razón, siempre le vemos la misma parte. Es así que el otro lado lo llamamos: 

El lado oculto de la Luna, por esa razón nunca lo vemos, pero si ha sido visto por cámaras de televisión y por astronautas que han orbitado la Luna.

 La misma condición de invisibilidad del otro lado ha sido alimento para la imaginación de escritores de ciencia ficción que sitúa en ese lado campamentos de extraterrestres cuyo oficio es espiarnos y preparar una supuesta invasión. 

No pocos de esos relatos han trascendido al imaginario popular y son dados por ciertos. 

Al ser el ciclo del día-noche lunar de 28 días terrestres, el día y la noche duran catorce días terrestres cada uno, lo que hace que las noches sean muy frías (temperatura mínima -173 °C, léase grados Celsius, no centígrados) y oscuras (temperatura máxima 122 °C), y los días, muy calientes y radiantes.

Vale decir que los viajes tripulados por hombres a la Luna, nunca se hicieron a la parte oscura, porque podría significar muchos peligros para los humanos; pero los científicos de las distintas instituciones interesadas en estos temas, como: 

La NASA, tienen en mente, mandar robots, especializados en este tipo de tareas, para saber que hay allí y cómo se comporta la Luna en esa cara, invisible.


 Preciosa fotografía de nuestra gran amiga, a la que pudiéramos llamar:  Claro de luna.

La Luna, tiene un diámetro aproximado (3.476 km) de la cuarta parte del diámetro de la Tierra (12.742 km).

Masa en Física, es la cantidad de materia que tiene un cuerpo, la masa de la Tierra, es 81 veces mayor, que la de la Luna.

Densidad en Física es la cantidad de materia por metro cúbico, que tiene un cuerpo.

En cuanto a densidad se refiere, la Luna es tres quintas partes menos densa que la Tierra.

La gravedad, es una de las grandes leyes que regulan el Universo y consiste en la atracción que el cuerpo celeste ejerce, sobre todos los objetos que hay en su superficie.

 Por esa razón tanto la Tierra como la Luna tienen gravedad, pero la de la Luna, es un sexto de la que tiene la Tierra.


Así es la traslación de la Luna
alrededor de la tierra.

Estas diferencias de gravedad, nos estarían indicando que un paso normal en la Tierra, podría ser un brinco mortal en la Luna, porque en ella, nuestros cuerpos serían menos pesados.

La duración de la rotación de la Luna sobre su eje, dura aproximadamente: 27 días, 7 horas  43 minutos y 11,5 segundos, es decir, aproximado a 28 días; a este ciclo le conocemos con el nombre de mes sidéreo o mes sideral. 

Las palabras «sidéreo» y «sideral» significan ‘relativo a los astros´.

Es bueno decir que algunas culturas del planeta, la judía entre ellas, manejaban calendarios de 28 días por mes y eso les hacía un año de 13 meses. 

Así debieran ser los meses de nuestro año y recordemos que las constelaciones del gran zodíaco, no son doce sino trece, porque en él, no se anuncia la de Ofiuco.

La Luna se desplaza en el firmamento de oeste a este, es decir de occidente a oriente, pero el movimiento de rotación  de la Tierra, nos hace ver la Luna trasladándose en forma contraria.


 Así es la superficie lunar.
La luna recorre su órbita alrededor de la tierra a una velocidad de: 3.700 km/ hora. 

Este recorrido lo hace en: 27 días, 7 horas, 43 minutos y 11,5 segundos.

La distancia que hay entre la Luna y la Tierra es aproximadamente de: 384.403 km.

Con los continuos choques de rocas sobre su superficie, se formaron en ella, gran cantidad de llanuras, cráteres, crestas de montañas, profundos zanjones y valles más o menos nivelados, a los que llamamos mares, pero no de agua sino de polvo lunar.


Así se ve la Luna en el cuarto
de creciente.
La mayor cordillera de la Luna se llama Leibniz y tiene alturas hasta los 9.140 m, comparables con el monte Everest de la Tierra.

Es bueno traer a la memoria que el día lunes de la semana fue bautizado así, en honor a la Luna.

Los nombres de los mares de polvo Lunar, son muy simpáticos: Mar de La Tranquilidad; mar de La Serenidad; mar de Las Crisis; mar de Los Humores; mar de Las Nubes.


 Belleza de un eclipse Lunar.
Los eclipses lunares ocurren periódicamente cada 28 días, en los dos días en que Luna está perdida y a veces por efectos de superposición de astros, cuando la tierra se mete entre la luna y el sol; estos fenómenos han sido siempre un espectáculo para la humanidad y alrededor de ellos se han tejido todo tipo de leyendas.

La Luna, en nuestro planeta, es la que hace algunos milagros que son indispensables para que se dé, el milagro de la vida, a continuación vamos a ver uno a uno esos procesos tan importantes:

Ella, es la causante de las mareas altas y bajas, porque  ejerce atracción con su campo gravitacional, sobre todos los líquidos que hay en la superficie del planeta y por esa razón, las aguas de los océanos suben y bajan cada doce horas y eso es lo que no deja a las aguas en reposo de los grandes océanos, estar a nivel con las orillas; con esa agitación que produce la Luna, las aguas de los océanos se oxigenan y tal vez sea la razón, con la ayuda de la sal que contienen, para que no se descompongan.

Pero esa misma atracción sobre los líquidos, hace que la savia que nutre a los grandes bosques terrestres, suba hasta la última copa de cualquier vegetal, por alto que sea, para mantenerlo bien alimentado; la secoya, un árbol propio de los bosques de Norteamérica, que llega a medir hasta setenta metros de altura, lleva la savia que extrae del suelo, hasta las partes más altas de su estructura, por este fenómeno de atracción sin ninguna dificultad.

Recordemos que las plantas no tienen corazón que impulse la savia a través de sus tallos y sus hojas.

Es bueno citar algunos ejemplos de las cosas que tienen que ver con la Luna:

Un embarazo, es el equivalente a nueve ciclos lunares; los marineros, siempre se fijan en la luna, en las horas de la tarde, para saber cómo se va a comportar el clima al día siguiente.

En la agricultura, siempre tenemos en cuenta las fases de la Luna, para saber acerca de las siembras, las podas, las cortadas de las maderas, los ciclos de abonada y si no ponemos en práctica, estas normas, ligero estamos pagando con grandes pérdidas, el hecho de no haberlas practicado.

Si cortamos la iraca, para los techos en la creciente, veremos con mucha amargura que el lugar que cubrimos con esas hojas, a los dos o tres meses, cae en pedazos destruido por las termitas.

Si cortamos la madera para las construcciones, en la creciente, la casa que estamos haciendo caerá al suelo en menos de lo que creemos, porque la madera es atacada por las polillas y las termitas.

Si la Yuca es arrancada en las crecientes, estará dura y no se dejará cocinar.

¿Pero cuál es el porqué de estas cosas?

Cuando cortamos las maderas para una construcción en la fase de Luna creciente, las maderas duran muy poco, porque sus fibras están cargadas con el máximo de agua y al secarse, quedan abiertas blandas y llenas de aire y esto propicia el ataque de los insectos, que sin duda vendrán a comérsela.

Cuando las maderas se cortan en la fase de menguante, no tienen tanta cantidad de agua y esa razón hace que sequen  y queden cerradas, a la acción de tiempo de los insectos.



Este gráfico nos muestra como fluye
la savia en las plantas, según las fases de la Luna.

La agricultura ancestral, era manejada con mucho cuidado y nuestros campesinos, guardaban todos los secretos que la humanidad había aprendido, de cómo se comportaban la tierra y los astros en una sincronización armónica; pero la agricultura actual, dice que esas prácticas eran cuentos de viejas y de brujos y por esas razones, han descuidado totalmente, la conexión universal que nos regía.

Aunque la Astrología, no es una ciencia exacta, como las matemáticas, el estudio de la Luna y el Sol, para hacer cualquier mapa astral de nacimiento de humanos, se basa en estos conocimientos.

Todos los astrólogos del planeta, basan sus conocimientos en las posiciones de los planetas, de la luna y del sol y con base en ellas, hacen los famosos mapas astrales tan de moda en nuestros tiempos y vale la pena decir que muchos de estos técnicos en astrología, viven cómodamente de los ingresos que estos conocimientos les propician.

La astrología nos acompaña desde tiempos inmemorables y recordemos que todos los grandes gobernantes de la tierra, tenían en su séquito de acompañantes más cercanos, a un astrólogo, que era el que decidía aquellas cosas que se debían hacer y las que no se podían ejecutar.


 En este gráfico podemos entender 
lo de las fases de la Luna.

La inclinación del eje terrestre, es causada por el campo magnético de la Luna y esa inclinación es la responsable de que en el planeta haya las estaciones alternadas en los dos hemisferios

Analicemos a vuelo de pájaro, como es la Luna que vemos en el firmamento, en las diversas fases o cuartos:

Cuando la Luna aparece en las dos primeras horas de la noche, en el sector occidental del cielo y solo tiene iluminado un borde, muy pequeño, es el cuarto de luna nueva; siete días más tarde cuando la Luna, tiene iluminada la mitad de su cara, es el cuarto de creciente;

Siete días más tarde, cuando la luna apunta a las primeras horas de la noche por el oriente, con su cara bien iluminada, es el cuarto de Luna llena: y siete días más tarde cuando solo muestra una mitad de su cara iluminada, en las horas del amanecer, es el cuarto de menguante; es importante saber, que cuando la Luna desaparece del cielo por uno o dos días, es lo que conocemos con el nombre de Pérdida de Luna.


 Así pasan las fases en forma real.
Con sus movimientos de rotación y traslación, la Luna regula la velocidad con que la tierra hace su rotación sobre el eje y la retarda, para que no vaya muy rápido, este el más grande de los milagros, porque ocasiona que los días y las noches, sean de 12 horas; de lo contrario, sin la ayuda de ella, el día y la noche, serían de tres horas cada uno y no sabríamos decir los efectos nocivos, que nos hubiera causado esa circunstancia, a los seres vivos y a nuestras construcciones.

Voy a narrar a continuación, muchas experiencias que tienen que ver con las fases de la Luna, que las he oído de campesinos que fueron y siguen siendo, muy respetuosos, con las enseñanzas de nuestros antepasados.



Así llegó el hombre a la Luna
.
 La menguante es la fase de la Luna que favorece la recogida de las cosechas, la sacada del estiércol de los corrales, la volteada del compost, la cortada de la caña dulce y la siembra de plantas que producen frutos.

También se presta para sembrar tubérculos, remolachas, zanahorias, rábanos y papas.

Para sembrar todo tipo de plantas, es bueno hacerlo en la creciente, tres días antes de la luna llena. Pero la lechuga es un caso especial, porque se debe sembrar en la menguante.

No es conveniente sembrar en las menguantes que están en la víspera de los solsticios de verano o invierno (21 y 22 de junio y 21 y 22 de Diciembre), porque da mucha brega que esas plantas florezcan.

Las operaciones que se hacen con las plantas en el cuarto de luna nueva o en el de creciente, producen un desarrollo anormal de ellas, esto hace que les dé brega producir frutos.

Las operaciones que se realizan en los cuartos de luna llena y menguante, favorecen la producción de frutos y las plantas, no presentan crecimiento anormal o prematuro.

Si se desea que una planta crezca rápidamente, la debemos podar en luna nueva o en creciente; pero si lo que buscamos es que la planta se desarrolle normalmente y que entre en producción rápidamente debemos hacerlo en luna llena o en menguante.


Estos vehículos espaciales sirvieron
para las caminatas que el hombre realizó
con el fin de recoger muestras de sus rocas.

Para que el suelo quede esponjoso y pueda retener el agua, es bueno trabajarlo en Luna llena o en el cuarto de menguante.

Cuando sembramos cereales, si nuestro deseo es que produzcan buena cantidad de frutos, lo debemos hacen en el cuarto de menguante.

Las operaciones de cultivo que se hacen con los cereales, deben ser todas en el cuarto de menguante, para que los frutos sean de buena calidad alimenticia.

Cuando cultivamos forrajes, es decir, pastos para alimentar el ganado, se deben cortar en la Luna llena, que es cuando tienen la mayor cantidad de nutrientes para los animales. El heno en la luna llena o en menguante, tiene un color verde intenso.


Este gráfico muestra cómo la Luna
se aleja de la Tierra 4 cm por año.

Para cortar los árboles maderables, es bueno hacerlo en luna llena o en menguante; de lo contrario, las maderas no van a durar mucho, porque serán atacadas por el clima y los insectos.

La madera que se corta para leña, debe ser cortada en la creciente, que es el cuarto en donde está más seca; si se corta en luna nueva, quema muy mal.

Los árboles de hojas perennes, es decir, hojas que casi no se caen, deben ser talados en la menguante o en la luna nueva.

Labrar y desherbar la tierra, es una práctica que se debe hacen en las horas de la noche, en los días en que la Luna está perdida, para evitar que nazcan muchas hierbas silvestres.



Este gráfico nos muestra cómo
pudo haber aparecido la Luna.

 Para abonar la tierra, es preferible hacerlo en creciente; pero los abonos minerales deben aplicarse en luna menguante y en las horas de la mañana.

Cuando se abona con estiércol, es bueno hacerlo en las menguantes.

Las estacas para las cercas, se deben cortar en luna nueva, para que duren más y se deben organizar las puntas que vamos a clavar.

El maíz y el girasol, se deben sembrar en las menguantes.

El arroz y la soja, se deben sembrar en las crecientes.

Si queremos que las lechugas, no espiguen muy ligero, las debemos sembrar en menguante.



Las mareas son las responsables
del alejamiento de la Luna.



Las maceraciones y preparaciones de plantas, se deben hacer en recipientes de madera y ojalá en la creciente.

Los desplazamientos de ganados se deben efectuar en las crecientes o en las menguantes.

Las vacas y las yeguas se deben aparear en creciente o en luna llena.

El recorte de las pezuñas se debe hacen en las crecientes.

Las limpiezas de los establos se debe hacen en las crecientes.

Las desparasitadas del ganado se hacen tres días antes de luna llena o en luna nueva.

Los huevos que se recogen para incubar, se deben recoger en las menguantes.

Los dulces y las conservas, se deben hacer en las menguantes, para que se conserven más tiempo.


Si cavamos las zanjas en luna llena, pueden durar más, sin desboronase. 


Los científicos esperan que el sol actúe
para que la luna no se aleje del todo.

Para arreglar los caminos, es mejor escoger las menguantes.

Si los cortes de cabello se hacen en creciente, se pueden peinar mejor.

Es una lástima, que la Luna se esté alejando en forma muy sutil, de la Tierra; cuatro centímetros por año, en los años que llevan observando este alejamiento, desde el día en que Armstrong, instaló el espejo para medir con rayos laser, la distancia entre los dos cuerpos celestes, se ha alejado un metro; 

Esto lo están observando los grandes astrónomos de la tierra y se cree que cuando se libere de la atracción del campo magnético de nuestro planeta, se pueda convertir en un planetoide, igual  a Neptuno o en un nuevo satélite de otro planeta; también hay la posibilidad de que choque con un asteroide y sus pedazos vayan al cinturón de estos cuerpos; cuando esto ocurra, cosa que nosotros no vamos a presenciar, porque será dentro de unos millones de años, la tierra tendrá grandes amarguras y tal vez desaparecerán sus formas de vida.

Sopetrán, Noviembre 2 del 2012.

Darío Sevillano Álvarez.

No hay comentarios. :

Publicar un comentario