miércoles, 4 de julio de 2018

Los colibríes, chupaflores o tominejos.



Los tominejos, una historia llena de sorpresas.

El colibrí, picaflor, barbudito, pájaro mosca o tominejo, es una pequeña ave del orden de los troquilinos es decir, que tienen pico muy largo y delgado y la mandíbula superior sin dientes; y a la familia de los apodiformes es decir, que tienen las patas cortas y las alas largas, para poder volar de la forma tan especial, que estos animales vuelan; su nombre científico es: Ensifera ensifera, palabra latina que traduce: que carga una espada y su nombre está repetido, porque es el prototipo de su orden.
Hay una especie que se diferencia del Ensífera, a la cual llamamos científicamente: Oxypogon guerinii; la palabra  ὁξιπογον, que significa: Con barba puntiaguda, dedicado al científico francés: Ghérin.


Estas aves pueden programar su vuelo, es decir que pueden volar hacia adelante, hacia atrás, hacia arriba y hacia abajo; también pueden suspenderse en absoluta quietud, frente a una flor.

Esto se debe a que manejan un diseño biofísico, de mucha precisión, porque tienen un corazón muy grande en relación a su tamaño, que puede hacer hasta 1.200 pulsaciones por minuto y eso les permite que sus alas las pueda batir a doscientas aleteos por minuto, pero hay una especie que puede batir las alas a 1.200 veces por minuto; y esta característica es la razón, para que sean tan pequeños, porque si fueran grandes y pesados, no podrían realizar estas proezas.


Las especies de colibríes que solo viven en el continente americano, desde Alaska, hasta chile, Uruguay y Paraguay, tienen unas medidas muy pequeñas que oscilan entre 11 y 25 cm, y un peso de 6 a 11,5 g.
Contamos con 343 especies de colibríes, pero es posible que algunas estén sin descubrir.
Construyen nidos en forma de copa con restos de hilos, ramas y plumas las cuales son amoldadas mediante el lengueteo y el apisonamiento, en dichos nidos suelen poner 2 huevos, los cuales son de color blanco, y los incuban por espacio de 12 a 16 días, y las crías están en el nido unos 14 días.
Es importante decir que en este orden, solo la hembra calienta los huevos y alimenta los pichones.
A pesar de que muchos mueren durante su primer año de vida, especialmente en el vulnerable periodo entre la incubación y el momento de abandonar el nido, aquellos que sobreviven viven una media de entre 3 y 4 años, pero hay unas especies que duran hasta 12 años.


Los troquílidos forman una familia muy numerosa que agrupa muchas especies de colibríes.
El tamaño, la forma del cuerpo y la coloración son tan ricos y variables que no admiten la comparación con ningún otro grupo de aves.
Pero exactamente, ¿qué es un colibrí?
El plumaje suele ser de colores muy variados y llamativos.
Pero en las especies más populares, las plumas son básicamente de color verde o gris claro con ciertos detalles metalizados.
Los ejemplares macho disponen de una especie de parche o mancha brillante sobre la garganta y otra de color violeta azulado que avanza por debajo del ojo y hacia atrás (dichas plumas se levantan cuando el animal se excita).
El color de las plumas en las hembras es muy similar a los machos, pero las manchas de la garganta y del oído son un poco más pequeñas. 


Por esto, el colibrí tiene muy poco dimorfismo sexual (es decir la diferencia entre el macho y la hembra).
Por este motivo, es muy difícil diferenciar o identificar ejemplares de cada sexo.
Incluso en algunas especies se tiene que recurrir a un análisis de ADN para poder saberlo.
Tienen cola bifurcada o redonda, bastante amplia respecto al tamaño total del cuerpo.
La especie Topaza bella, del nordeste de América del sur, posee una cola en forma de cruz; Sappho sparganura, de Bolivia, Argentina y Perú, tiene la cola bifurcada.

Su pico es de color negro y muy delgado. El colibrí pico de espada es el que más grande lo tiene, con una longitud total de 10 cm.
Dentro de él cuenta con una lengua bífida muy larga en forma de tubo que emplea de forma tremendamente efectiva y le sirve para obtener el néctar de las flores que necesita para alimentarse.
El colibrí, es el ave más veloz que tenemos en la tierra.
Respecto a la alimentación de los colibríes, básicamente se compone del néctar que obtienen de las flores.


 Esta sustancia natural está formada casi en su totalidad por azúcar.
Si no se alimentara de azúcares, no podría realizar la labor de libar el néctar de las flores, porque ese trabajo exige una cantidad muy alta de calorías, para realizarlo.
La gran predilección de los colibríes, son las flores de color naranja o rojas; pero también liba el néctar de las flores de otros colores.
Pero como también necesitan proteínas en su alimentación, deben incluir: Hormigas, lombrices, abejas y avispas y estas hacen la cuarta parte de su alimentación.
Algunas veces, cuando un pájaro carpintero hace una herida en el tronco de un árbol, los colibríes, aprovechas y se alimentan de esa savia.


Muchas especies de colibríes, viven en cautiverio o en semicautiverio y se adaptan a esta forma de vida, pero es de lógica que hay que mantenerles un régimen alimentico especializado, para que no se vayan a desnutrir.


Por estas razones empezaron a llegar estas especies a Europa, pero como son animales muy exigentes, a pesar de su pequeñez, las personas que los manejan deben tener los conocimientos científicos adecuados, para poder manejarlos
El lugar más apropiado para su cría es un invernadero o una gran jaula acristalada, con plantas, un termostato, un pulverizador y una lámpara de calor, donde encontrará en invierno las condiciones óptimas.

Sopetrán, Julio 2 del 2018.
Darío Sevillano Álvarez. 



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