domingo, 25 de diciembre de 2016

Conocimientos acerca de las nubes.


¿Qué podemos decir acerca de las nubes?

Darío Sevillano Álvarez

Con este interrogante, los llevaré a un pequeño paseo por los cielos, para que refresquemos los conocimientos que aprendimos sobre las nubes, que son un fenómeno especial que a diario, manejamos en nuestra atmósfera.


Antes de entrar en materia, refresquemos la palabra meteoro, que, es un vocablo que viene del griego: «μετέωρος» que significa ‘elevado en el aire’ y se le aplica a cualquier fenómeno atmosférico: aéreo, acuoso, luminoso o eléctrico, como el viento, la lluvia, el arco iris y los rayos; pero también se puede aplicar a las  cosas que brillan con un resplandor muy vivo y fugaz, como los pedazos de piedras que vienen del espacio, a los que llamamos: meteoritos, como los que a diario caen sobre la superficie terrestre y que nosotros llamamos estrellas fugaces, que se resbalan a toda hora en nuestra atmósfera.
Con esta explicación en las manos, ya podemos definir el concepto de nubes.
Las nubes son hidrometeoros, formados por una masa visible de cristales de nieve o gotas muy finas de agua, suspendidas en la atmósfera terrestre.

Más adelante vamos a ver, que también hay nubes en otros de los planetas y en algunos de los satélites de ellos.


Las nubes se ven blancas, porque tiene la capacidad de dispersar toda la luz solar y es esa la razón de su color.

Pero cuando son demasiado gruesas, la luz no es capaz de atravesarlas y por esa razón se vuelven de color oscuro, gris o casi negro. Estas son las nubes que a cualquier humano le anuncian que se va a desatar un aguacero, porque ya sabemos que son nubes de lluvia.

Es bueno aclarar que con la gotas de agua o con el vapor de las nubes, se mezcla el polvo atmosférico y éste compuesto de agua y polvo, puede convertirse en lluvia, en granizo o en nieve, dependiendo de las condiciones atmosféricas: grados de temperatura, presión atmosférica, frentes fríos o calientes y lo que llamamos Higrometría, que es la parte de la ciencia que se ocupa de medir el grado de humedad de la atmósfera. 

Hasta principios de siglo XIX, nadie sabía cómo se llamaban las distintas forma de nubes, pero un sabio de la época, Luke Howard, que se desempañaba como: Químico y meteorólogo, diseñó un método, que ahora es el sistema internacional, por el cual nos regimos.

Resultado de imagen para imagen de Luke Howard

En ese sistema, nuestro hombre, decidió que eran cuatro categorías de nubes, a las cuales llamó: Cirros, estratos, cúmulos y nimbos.

Miremos con toda la paciencia del caso, que significa cada uno de estos nombres.

La palabra «cirros», creo yo, fue asociada por el diseñador al gran parecido de ese tipo de nubes, con un pequeño tumor, porque este tipo de meteoros se presentan muy altas, son de consistencia sedosa, y aparecen en manadas o asociadas con otros tipos de nubes; nuestros abuelos les decían rebaños de ovejitas, porque a eso se parecen cuando están en cantidad.

Veamos unos cirros:

Las más pequeñas en forma casi redonda, son cirros.

Pero a veces se juntan varios tipos de nubes y el diseño, que se presenta es una palabra compuesta de dos nominaciones.

En este caso, hay cirros y unos cúmulos o acumulaciones grandes de cristalitos y vapor, pero como están tan altos, a estas nubes las llamamos cirros y altocúmulos.

El aparato que sirve para medir la cantidad de lluvia que ha  caído en un aguacero, se llama pluviómetro, que es casi por lo regular un cilindro, cuya tapa superior es un embudo en el cual cae la lluvia y es llevada a la base del cilindro, una escala métrica colocada entre él, mide la cantidad de milímetros cúbicos de agua que cayeron. 



Casi siempre en las horas de la tarde cuando el sol está a punto de perderse en el horizonte, las nubes toman hermosos colores, que son descomposiciones de la luz solar en los cristales de ellas, por el mismo principio que se forman los arcos iris, a estas les decimos arreboles.

Recuerden el refrán: «Arreboles por la tarde, agua por la mañana». 

Esto quiere decir que si hay muchas nubes en la tarde, posiblemente se van a conservar, hasta la salida del sol, para generar una lluvia.

Los estratos son nubes formadas por extensa capas de vapor de agua, que con alguna frecuencia generan lluvias continuas, pero suaves.


La palabra estratos, significa que son nubes globulares muy grandes que contienen mucha cantidad de agua.
Pero en meteorología, se pueden hacer una cantidad de mezcla de formas de nubes y por esa razón, cuando anuncian que un aeropuerto está cerrado, muchas veces aparecen nombres compuestos, de dos o más formas de nubes, como en el caso siguiente.


Los nimbos, son nubes de color oscuro, que tiene la capacidad de precipitar grandes aguaceros. La palabra «nimbo», significa ‘nube resplandeciente’. Casi siempre son bajas, oscuras y en la actualidad, se les llama nimbo-estratos, porque son las dos categorías que generan lluvias y casi siempre, están asociadas.

Por regla general, cuando una de estas nubes, se acomoda sobre un lugar de la tierra, es porque allí, va a llover en forma torrencial, siempre y cuando el viento, no mueva la nube para otra parte.

En este tipo de nubes, es en donde más se amañan las condiciones, para producir tormentas eléctricas o tempestades.

Veamos un nimbo-estrato, con estas dos palabras se puede hacer una contracción así: Nimbostrato. 


Los cúmulos son grandes nubes hinchadas, con sus bases planas, que divagan por los espacios celestiales, en los días de verano.

Observen como los cúmulos, casi siempre están imitando, figuras animales de gran tamaño, que pudiéramos llamar mastodontes, por esta razón algunas nubes toman el nombre de mastodónticas.

Veamos unos cúmulos:


Pero los cúmulos, también se asocian con los nimbos y dan origen a las nubes llamadas cumulonimbos:


Hay unos cirros preciosos que se forman en los días de verano, como estos:


Cuando lo cirros se alían con los estratos, hacen malabares en el cielo, como estos:


Si los cúmulos están muy elevados, se llaman altocúmulos
como en esta fotografía:


Cuando los estratos se elevan mucho en la atmósfera, hacen estas autopistas aéreas, tan de buena presencia, a las que llamamos altoestratos, también aquí podemos hacer contracción y decimos altostratos.


Ahora miremos un gráfico, que nos muestra como es la posición de las nubes en la atmósfera, es decir la altura, que la que genera los distintos tipos de nubes:


Como punto final veamos cómo son las nubes en otros planetas:

Las nubes de Venus están compuestas de
gotas de ácido sulfúrico.

En cambio las de Marte son compuestos de
agua y dióxido de carbono.

Titán, que es un satélite, tiene una atmósfera cubierta por
hidrocarburos y debajo de ella, hay nubes de metano.

Los dos grandes colosos del sistema solar: Júpiter y Saturno, tienen varias categorías de nubes, así: Unas son de amoníaco, otras son de hidrosulfuro de amonio y unas terceras son de agua.
 

Urano y Neptuno, tienen nubes de metano y
algunas parecidas a las de Júpiter.
 
En este tiempo, que está en pleno desarrollo el fenómeno natural de la Niña, es indispensable, para cualquier ciudadano, conocer un poco acerca de las nubes, por esta razón los llevé a este hermoso paseo por los cielos.
Sopetrán, Diciembre 25 del 2016.


Darío Sevillano Álvarez.

viernes, 23 de diciembre de 2016

Noveno día de la novena de Aguinaldos.


DÍA NOVENO:


San José, no era un viejecito, ni era un carpintero.


“José hijo de David, no temas tomar contigo a tu mujer”. Marcos I,  20.

Pobre San José, con aquellas cosas que le achacan todas las tradiciones populares. 

Estudios recientes, han demostrado, que era un hombre Joven, resuelto y emprendedor.

 Se cree que cuando se unió a la virgen, andaba entre los 18 y los 30 años.

Sin embargo, un evangelio apócrifo, dice que cuando se unió a la virgen, tenía 89 años y que murió de 111 años.

Los evangelios de la biblia, dicen muy poco de él:” Vir Justus, que traduce: Varón justo”.  Mateo I, 19.

Pero la palabra τεχτων del griego, significa: Carpintero constructor.


Que pesar que las imágenes, lo muestran, un anciano de barba y de bastón, para alejar cualquier duda de que pudiera ser el padre carnal del niño Dios; fue tanta la problemática, que se prohibía representarlo en imágenes cargando al niño o llevándolo de la mano, con el fin de no crear dudas.

Algunos autores, se atrevieron a afirmar, que era un hombre viudo, con seis hijos; cuatro varones y dos damas.



Cuando lo representaban con un bastón, solo querían mostrar su vejez; pero estudios muy modernos, han demostrado que el bastón lo llevaba, porque era un caminante a toda marcha. 

Recuerden el viaje de Nazaret a Belén; el de Israel a Egipto; y el regreso de Egipto a Nazaret.


También se habla de un bastón que floreció, cuando fue llevado al templo con los bastones de otros pretendientes de la virgen. 

Pero estas afirmaciones, solo son leyendas.

Otro argumento para decir que era un viejo, fue su temprana muerte, antes de la de Jesucristo; que fue acompañada de Jesús y María y que por ésta razón es el patrono de los agonizantes.


Hay otro argumento que habla de la vejez de San José, porque como fue un patriarca, todos ellos en la biblia fueron viejos: 

Noé, Abraham, Jacob, Moisés, David, porque para ser patriarca, había que ostentar una barba larga y canosa y un bastón.

No fue José un carpintero cualquiera, haciendo banquetas y otras bobadas; fue un constructor de ciudades, casas, templos y edificios.

El San José de serrucho en mano, en una pequeña carpintería, surgió en el siglo XVI, cuando unos pintores así lo concibieron.

En resumen, las costumbres familiares de la época de San José, daban por padre y madre a aquellos que instruían a sus hijos en la Torah, la biblia de los judíos; y San José así lo hizo.

“Para los judíos del tiempo de Cristo la religión, la ley, la historia, los valores éticos y la educación constituían un todo inseparable. 



A través de la ley escrita (Torah) y de la ley transmitida oralmente (Mishna) enseñada de generación en generación, se formaba el cuerpo doctrinal del pueblo elegido. 

La familia era el medio natural de formación, después los rabinos y las sinagogas junto con el templo ocupaban un lugar privilegiado en la enseñanza institucionalizada. 

El imperio romano, del cual Israel formaba parte, se caracterizaba por un sincretismo que llevaba a mantener y respetar las tradiciones e instituciones, filosofías y religiones de los pueblos sometidos (griegos, asirios, egipcios, judíos, etc) dándoles una perspectiva romana. 

La educación judía giraba entorno a la ley, la ética, la historia desde el punto de vista de la ley, las costumbres de vida; en contraste con la educación griega, no nos olvidemos que el entorno cultural de Israel sigue siendo el helenismo, que primaba la ciencia, el arte, la lengua y el deporte. 

De otra parte se nota en la enseñanza de Israel del siglo primero la influencia de las corrientes filosóficas predominantes en Roma: el estoicismo y el cinismo”.


Es muy importante hacer énfasis en una palabra que utiliza la Madre María Margarita del Santísimo, en la novena de Aguinaldos:

Hoy en día la expresión «padre putativo» sólo se oye en aquellas novenas de aguinaldo antiguas cuando se reza la oración a San José que empieza así:

¡Oh santísimo José, esposo de María y padre putativo de Jesús!

Cómo nadie consulta el Diccionario para saber el significado, tal palabra es recibida con cierta burla por su sonido parecido al de una palabra tenida por obscena que significa ‘prostituta’, razón por la cual muchos han cambiado por: Padre adoptivo. 

Craso error, porque las dos palabras son diferentes:

La palabra «putativo», según el Diccionario de la lengua española de la Real Academia Española, significa ‘Reputado o tenido por padre, hermano, etc., no siéndolo’; mientras un hijo adoptivo es aquél que mediante una acción legal es recibido como hijo sin serlo. 

El «adoptivo» es el hijo, el padre es «adoptante». 

Como San José no denunció que el hijo de María no era suyo ni hubo acción legal de adopción, ha sido el padre putativo de Jesús durante más de 20 siglos sin que un papel legal lo certifique. 

Reír a causa del mal sonido de la palabra es demostrar ignorancia semántica.

Como ya lo expliqué, la biblia en sus cuatro evangelios, poco habla de San José y la última mención que hace de Él, es cuando el Niño Jesús, es encontrado en el Templo de Jerusalén, conversando con los doctores de la ley. Lucas II, 48.


Ahora veamos: ¿Cómo nació el árbol de Navidad?


Casi todos los historiadores narran los mismos sucesos que nos llevaron a la hermosa tradición del árbol de navidad.


Todos creen que fueron los celtas los primeros que celebraban las fiestas de sus dioses, alumbrando un árbol grande, del cual decían que sus copas altas estaban en el cielo y sus raíces llegaban al infierno.


Pero hubo un Santo especial, San Bonifacio, que fue un gran evangelizador de Alemania, que remplazó los árboles que representaban al dios Odín, por un pino gigante y lo adorno con manzanas y velas, para representar al Dios de los cristianos.

Esta costumbre se fue extendiendo por los países cercanos y luego, se difundió por toda la tierra.


Recordemos que el primer árbol de navidad, con los elementos que ahora lo conocemos, apareció en Alemania en el año de 1605.


Sopetrán, Diciembre 9 del 2016.

Darío Sevillano Álvarez. 

jueves, 22 de diciembre de 2016

Octavo día de la novena de Aguinaldos.


DÍA OCTAVO:

LA INMACULADA CONCEPCIÓN, NO ES LA VIRGINIDAD DE MARÍA.


“¿María respondió al ángel, como será esto, puesto que no conozco varón?”. Lucas 1-34.

Muchas personas que se tildan de duchas en cuestiones religiosas, cometen el error de creer, que la inmaculada concepción es la representación de la virginidad de María.

Sin embargo, no es así:

Pues la inmaculada y la virginidad de María, son dos verdades teológicas diferentes, que la iglesia Católica defiende. 

Lástima, que son verdades que no se pueden demostrar científicamente.

La inmaculada concepción es el hecho de que la Virgen nació libre del famoso pecado original, otra verdad dogmática, que no tiene explicación científica.

Y la Virginidad, es el hecho de que María concibió al niño, sin la intervención de un varón.


Traigamos a la memoria dos citas que se ajustan perfectamente, a los temas que estamos manejando:

”Envió Dios el ángel Gabriel a una ciudad de galilea llamada Nazaret a una virgen desposada con un hombre llamado José, de la casa de David, el nombre de la virgen era María”. Lucas I, 26 y 27. 



Con ésta cita en la mano, podemos decir que la virgen era inmaculada.

La otra cita sería: “y el ángel le respondió: El espíritu santo vendrá sobre ti y el poder del altísimo te cubrirá con su sombra”. Lucas I,  35.

Ésta cita tiene que ver con la virginidad de María, pero hay una que yo llamaría la prueba reina:

”Y José su esposo, que era un varón justo, y no quería descubrirla, pensó en dejarla libre secretamente, pero un ángel del Señor se le mostró en sueños, diciéndole: José, hijo de David, no temas tomar a María tu mujer, porque lo engendrado en ella, es del Espíritu Santo”. Mateo 1-20.


Recordemos que Santa Ana, concibió a la Virgen, sin mancha de pecado original.


Es bueno traer a la memoria que San Joaquín era el Padre de Nuestra Señora la Virgen María.


Los ángeles que utilizamos en la navidad, son el símbolo del amor, la bondad y la misericordia y personifican los más altos ideales, de los que los seres humanos, podríamos estar adornados; son los mensajeros entre el cielo y la tierra; estuvieron presentes en cada uno de los acontecimientos que rodearon el nacimiento de Cristo y cada ser humano, tiene su ángel de la guarda.


En los coros angelicales, según un escritor sagrado que se llamaba: Dionisio, son nueve jerarquías, miremos este asunto en una mejor forma:

   Desde el siglo VI, un Padre de la Iglesia denominado el Pseudo-Dionisio, escribió sobre los coros angelicales y los clasificó, por triadas, es decir por montones de tres, a saber:


I. Jerarquía Suprema:
– querubines.
– serafines.
– tronos.

II. Jerarquía Media:
– dominaciones.
– virtudes.
– potestades.

III. Jerarquía Inferior:
– principados.
– arcángeles.
– ángeles.


  
Nuestro mayor anhelo, es mantener bien informados a todos los visitantes de nuestro blogger.

Sopetrán, Diciembre 8 del 2016.


Darío Sevillano Álvarez.